Servicios

Manipulación vertebral

La manipulación quiropráctica es un procedimiento en el cual se aplica una fuerza controlada y súbita a una articulación de la columna vertebral para mejorar la función física en pacientes que sufren dolor de la espalda inferior, dolor de cuello y dolores de cabeza. Durante el tratamiento, el paciente está acostado boca abajo sobre una mesa acolchada, especialmente diseñada para el uso en actividades quiroprácticas, mientras que el quiropráctico empuja la articulación vertebral más allá del rango normal de movilidad de una manera controlada y segura. La mayoría de los pacientes alcanzan la mejora máxima después de 6 a 10 ajustes.


Ventosaterapia

La ventosaterapia es un procedimiento que implica calentar unas ventosas especiales y colocarlas sobre la piel de la espalda, cuello y hombros. Al calentar el aire dentro de la ventosa, se crea un vacío que aplica una fuerza de gradiente de presión en el tejido. Esto estimula la circulación sanguínea, afloja el tejido conectivo y promueve la sanación. La ventosaterapia se recomienda para aliviar el dolor, reducir la inflamación, mejorar la circulación sanguínea y promover la relajación.

Análisis postural y de la marcha

El análisis postural y de la marcha implica un examen de la postura para identificar y corregir desbalances que puedan causar dolor o molestias. Durante el tratamiento, el quiropráctico analiza la alineación estática y dinámica, evalúa los rangos de movilidad y lleva a cabo diversas pruebas manuales. Entonces, desarrolla un régimen de ejercicios basado en los hallazgos del examen inicial. Entre los beneficios, se cuenta la mejora de la alineación postural, aumento de la flexibilidad, reducción de desgaste en las articulaciones, mejora del balance, prevención del esfuerzo muscular y dolores de espalda.

Descompresión vertebral

La descompresión vertebral es un tipo de tracción motorizada, no quirúrgica, que alivia el dolor de espalda. La descompresión vertebral funciona estirando suavemente la columna vertebral para aliviar la presión en los discos intervertebrales. Durante la terapia, los discos herniados se pueden retractar, reduciendo la presión sobre el nervio y promoviendo el movimiento de agua, oxígeno y fluidos ricos en nutrientes que sanan el disco. La descompresión vertebral se utiliza para tratar una variedad de afecciones, incluyendo el dolor de espalda y cuello, ciática, hernias discales, enfermedad degenerativa de los discos y el síndrome articular posterior.

Terapia de Liberación Activa

La terapia de liberación activa trata los tejidos blandos de su cuerpo a través de una combinación de manipulación y movimiento. La terapia de liberación activa trabaja al romper adherencias que son acumulaciones densas de tejido cicatrizal que limitan la flexibilidad y causan dolor y rigidez en los músculos y las articulaciones. Los siguientes signos indican que usted ha acumulado tejido cicatrizal y pudiera beneficiarse de la terapia de liberación activa:

    • Rigidez en su cuello, codo, manos, rodillas o espalda
    • Aumento de dolor durante el ejercicio
    • Dolor agudo en la planta del pie cerca del talón
    • Dolor, entumecimiento u hormigueo en sus dedos
    • Reducción de la flexibilidad y rango de movimiento limitado
    • Disminución de la fuerza
    • Articulaciones inflamadas

Estabilización vertebral

La estabilización vertebral es una forma activa de ejercicio que fortalece los músculos que ayudan a soportar la columna vertebral y reduce el dolor de la espalda inferior. Con la asistencia de un quiropráctico y a través de un régimen de ejercicios, el paciente se entrena para mantener una posición neutral de la columna vertebral. El objetivo es reducir el dolor de espalda, sanar las lesiones de los tejidos blandos, tales como estiramientos musculares y desgarros de ligamentos, y reducir la posibilidad de lesiones de espalda debido al estrés repetitivo.

Relajación Post Isométrica

Durante la relajación post isométrica, el músculo se coloca en una posición estirada; entonces, se ejecuta una contracción isométrica contra una resistencia mínima. Se continúa con una relajación y estiramiento suave a medida que el músculo se afloja. Esta técnica se aplica a músculos tensos y adoloridos que se asocia comúnmente con dolor músculo-esqueletal. La relajación post isométrica se ejecuta como se describe a continuación:

  • El músculo hipertónico se extiende hasta el punto donde se nota la primera resistencia al movimiento.
  • Se aplica una contracción sub maximal (10-20%) del músculo hipertónico, en sentido opuesto a la barrera, por un período entre 5 a 10 segundos mientras el terapeuta aplica resistencia en la dirección opuesta.
  • Después de la contracción isométrica, el paciente se relaja y exhala mientras se aplica un suave estiramiento.
  • Se repite el procedimiento dos o 3 veces.

Técnica de Graston

La técnica de Graston, también conocida como la movilización del tejido suave asistida por instrumentos, es una forma de terapia manual que implica el uso de instrumentos y una forma especializada de masaje/raspado sobre la piel. El objetivo de la terapia es reducir el dolor y aumentar la función a través de una combinación de degradación del tejido cicatrizal, estiramiento del tejido conectivo para reajustar estructuralmente el tejido suave, y así promover un ambiente de sanación para el tejido suave lastimado.

Método McKenzie

Desarrollado por el experto en fisioterapia Robin McKenzie en los años 50s, el Método McKenzie es un enfoque muy bien investigado, basado en ejercicios, que incluye la evaluación, diagnóstico y tratamiento basado en una evaluación general, sin el uso de técnicas invasivas de diagnóstico por imagenología, tales como rayos X y resonancia magnética. Los principios del tratamiento del Método McKenzie promueven la habilidad natural del cuerpo para repararse a sí mismo sin la necesidad de medicación, ultrasonido, agujas o cirugía. El Método McKenzie es una evaluación confiable, desarrollada para todos los problemas músculo-esqueletales, incluyendo el dolor de espalda, cuello, rodilla, hombro y tobillo, así como los problemas asociados con ciática, el dolor de la articulación sacroilíaca, artritis, enfermedad degenerativa de disco, espasmos musculares y entumecimiento de manos y pies.